El bufete que representa a la cajas cifra en 300.000 euros el coste de cada empleo amortizado en el sector
Aunque a la larga supondrá un notable ahorro para las entidades, los recortes de personal que prevén la mayoría de las cajas inmersas en procesos de fusión también tendrán un importante coste inicial. En el caso del sistema institucional de protección (SIP) que promueve la CAM, junto a Cajastur y las cajas de Cantabria y Extremadura, el desembolso podría rondar los 600 millones de euros, si se cumplen las previsiones que el pasado martes realizó el socio de Sagardoy Abogados, Martín Godino, quien cifró en unos 300.000 euros el gasto medio por cada empleo amortizado en el sector. Se da la circunstancia de que este bufete, el más importante de España en su ámbito, es el que está negociando con los sindicatos el acuerdo laboral del futuro grupo en nombre de la CAM y de sus socios, y que el propio Godino ha participado en persona en las conversaciones. Además, también es el responsable de la negociación en el SIP de Bancaja y en la fusión de las cajas gallegas. Aunque la cifra que ofreció el director de Sagardoy se refería al conjunto del sector de las cajas de ahorros, tanto Sicam como CC OO consideran que el coste medio por prejubilado en el grupo de la entidad alicantina podría acercarse bastante a esa cantidad. Por tanto, los 2.000 empleos que los responsables del SIP prevén suprimir supondría un gasto cercano a los 600 millones de euros, una cifra superior a la suma de los beneficios que declararon los cuatro socios del grupo el año pasado y que ascendió a 456,7 millones de euros. No obstante, los representantes sindicales dejan claro que los citados 300.000 euros son una media y que la cantidad que percibirá cada trabajador afectado dependerá del tiempo que le quede hasta alcanzar la edad legal de jubilación (cuanto mayor sea menos cobrará) y de su sueldo. Además, recuerdan que ese montante no irá a parar íntegramente a los empleados que acepten marcharse ya que también incluye las cotizaciones a la Seguridad Social y otros gastos que deben asumir las entidades.
Muchos directivos Otro de los motivos de que la cifra sea tan eleva es que entre el personal que puede acogerse a las prejubilaciones se encuentran muchos cargos medios y directivos, como señala el portavoz de la sección de CC OO en la CAM, Isidro Grao. "Hay muchos directores de oficina y de zona que cumplirían con los requisitos", apunta. Además, también son los trabajadores más mayores los que acumulan mayor antigüedad y, por tanto, incluso sin ningún tipo de cargo, son los que más cobran. En el caso de la entidad alicantina, además, hay que recordar que a finales de los años 90 se produjo un cambio en el convenio y los que empezaron a trabajar a partir de esa época pasaron a tener 19,7 pagas frente a las 22 que perciben los más veteranos. No obstante y, a pesar del desembolso inicial, los recortes de plantilla supondrán un importante ahorro para el grupo a largo plazo, "un ahorro real pero sobre todo contable", según se encarga de distinguir el portavoz de Sicam, César Estrada. Por una parte, las entidades dejarán de pagar una parte de los salarios, ya que las indemnizaciones previstas no cubren el 100% del sueldo que percibirían los trabajadores afectados hasta su edad de jubilación (la última oferta de los gestores del SIP era el 75% del salario fijo mensual). También se dejan de pagar dietas, kilometrajes, incentivos y otros gastos similares. Sin embargo, el beneficio a nivel contable es mucho mayor, según Estrada. El motivo es que el Banco de España obliga a amortizar toda la indemnización en el primer año, aunque el trabajador la perciba mensualmente hasta que se jubile, lo que rebaja notablemente el nivel de gasto en los ejercicios siguientes "y permite a las entidades presentar unos incrementos de beneficios magníficos, que es lo que al final se persigue", señala el representante del Sicam.
La ventaja del FROB Aunque el dinero que las entidades del SIP recibirán del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) -1.493 millones- no puede utilizarse directamente para pagar las prejubilaciones, según recuerda César Estrada, permitirán liberar otros recursos para hacerlo. En su conjunto, las cinco entidades que formarán parte del grupo de la CAM (los cuatro socios y Caja Castilla-La Mancha) gastaron el pasado año 958,8 millones de euros en remunerar a su personal.
1.400 millones en Bancaja En el caso del SIP de Bancaja y Caja Madrid, el gasto en el ajuste de plantilla podría superar los 1.400 millones de euros, ya que la media por trabajador ascendería a 390.000 euros, informa J. Cuenca. Para todo el sector de las cajas de ahorros, el volumen de prejubilaciones previsto se sitúa entre las 20.000 y las 25.000, lo que supondrá un gasto de entre 6.000 y 7.500 millones de euros, según las cifras de Sagardoy. |