La caja sortea una situación de impago dentro de diez días asumiendo que su solvencia y beneficios a cierre del pasado ejercicio aún eran suficientes
El Banco de España ha autorizado a Banco CAM, el que ha asumido todo el negocio de la caja alicantina, a pagar el próximo día 15 el cupón trimestral programado de una emisión de deuda subordinada especial y dos colocaciones de participaciones preferentes lanzadas por la entidad en 2001 y 2002. Fuentes de la caja creen que la medida contribuirá a tranquilizar a impositores, clientes y mercado.
Teniendo en cuenta el importe de las emisiones de preferentes (459,6 millones de euros) y el tipo de interés que pagan (euribor a tres meses más 0,20% y 0,25%), el coste anual de estas dos colocaciones no alcanzaría los 10 millones de euros, asumiendo la estabilidad del euribor.
CAM –intervenida y de próxima nacionalización, a la espera de recibir 2.800 millones de capital público y apoyada ya con una línea de liquidez de 3.000 millones– habría podido finalmente pagar la remuneración a los inversores privados, por estar condicionada ésta a la situación de la caja a cierre de 2010.
El pago de las preferentes está vinculado a la existencia de beneficios suficientes: que el resultado del ejercicio previo supere el importe de los intereses de estos títulos durante el año en curso. El beneficio individual de CAM (no se conoce el consolidado) alcanzó 210 millones en 2010.
Un segundo condicionante es la solvencia: “las limitaciones impuestas por la normativa española sobre recursos propios de entidades de crédito”, indican los folletos de las emisiones. Aunque no se especifican fechas, fuentes financieras señalan que la referencia es igualmente en el ejercicio previo (2010), en el que CAM aún cumplía los mínimos de capital regulatorio.
Con estos argumentos, se habría acordado el abono. Un impago podría haber motivado, incluso, posibles litigios judiciales contra la caja por incumplimiento de contrato, indican las mismas fuentes.
El 29 de septiembre hay que abonar el cupón de la emisión de 850 millones de euros que CAM colocó en su red en verano de 2009. De cara a los próximos meses, la remuneración estará a expensas de encontrar una salida para la caja. El próximo año y con las cifras de 2011, no podrá argumentarse que CAM tiene solvencia y beneficios suficientes.
Polémica Más allá de tecnicismos legales y regulatorios, el pago de CAM alimenta el debate sobre quién debe asumir el coste de los rescates bancarios. Aunque el importe de los intereses no supondrá un quebranto significativo para la entidad, la paradoja es evidente: el dinero público va a entrar en la caja, mientras, en paralelo y aunque con un importe poco relevante, salen fondos para remunerar a unos inversores que siguen participando de la rentabilidad, pero no de los riesgos. |