Tal vez le esté traicionando el subconsciente y se refiera a la propia Bankia, donde la situación límite en que se encuentra Bancaja está poniendo en dificultades la viabilidad futura de la entidad.
Para Bancaja las cifras de su Informe Financiero Anual del 2010 no dejan lugar a dudas; además de los saneamientos que ha hecho contra su Cuenta de Resultados, ha tenido que sanear 3.545 millones de euros de sus activos contra Reservas, que finalmente han sido 2.546 millones netos de impuestos al contabilizar 999 millones como Activos Fiscales Diferidos (Créditos Fiscales).
Estos brutales saneamientos para poder cumplir con la normativa del Banco de España –como todo el resto de entidades financieras españolas-, y en definitiva presentar de una vez por todas la imagen real de la situación de Bancaja, han hecho que la Solvencia esté muy lejos de la mínima exigida por las normas internacionales (Basilea II), y todavía mucho más lejos de la exigida por el Banco de España y la futura exigencia de Basilea III.
Al cierre del 2010 los Fondos Propios de Bancaja –apenas 986 millones de euros- representaban respecto a los Créditos a la Clientela era el 1,51%, y estaría a años luz del 10% de Core Capital que exigiría el Banco de España a Bancaja por sus características.
Más aún, los Activos/Pasivos Fiscales Diferidos -menores pagos futuros del Impuesto sobre Sociedades (Créditos Fiscales)- no son un activo líquido y no van a poder computar como Core Capital cuando entre en vigor Basilea III, al cierre de 2010 eran 1.480 millones de euros, cifra muy superior a los fondos propios mencionados.
Bancaja, aplicando las futuras normas de Basilea III, aún con los Fondos Propios adicionales del Consolidado, -y sin contabilizar las ayudas del FROB- tendría al cierre del 2010 Core Capital cero o negativo.
Muy recientes están los problemas de la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), que provocaron la ruptura del Banco Base, liderado por Caja Astur, y que le han colocado al borde de la intervención. Las cifras de la CAM de solvencia de la CAM, en sus Cuentas Anuales del 2010 y después de hacer un saneamiento muy importante, son claramente mejores que las de Bancaja.
El Banco de España el 10 de marzo de 2011 comunicaba a 12 entidades que debían aumentar su capital, en el caso de Bankia el importe necesario era de 5.775 millones de euros, de los que unos 3.500 a 3.700 millones corresponderían a Bancaja.
Estos 5.775 millones son adicionales a los 4.465 millones ya comprometidos por el FROB, de estos últimos unos 1.500 millones sería la parte atribuible a Bancaja.
(En el cálculo del 10 de marzo el Banco de España pasó de puntillas por el tema de los Activos/Pasivos Fiscales Diferidos que en el conjunto de Bankia suponen unos 4.000 millones de euros, y que consideró parte de su Core Capital).
Además de sus evidentes problemas de Solvencia, la Rentabilidad Básica de Bancaja (Margen de Intereses más Comisiones menos Gastos de Administración) está bajo mínimos, muy, muy lejos de los bancos del IBEX 35 -19 puntos básicos en el último trimestre, en base anual, frente a 105 puntos básicos de Banesto-, y también por debajo de forma clara de Caja Madrid.
Esta bajísima rentabilidad y generación de recursos no va a mejorar de forma significativa en el 2011, y estará muy lejos de lo razonable en el 2012.
Los saneamientos realizados por Bancaja no han supuesto terminar ni mucho menos con los problemas de su morosidad y activos inmobiliarios, sino que sólo le ha situado en una posición de balance al inicio en 2011 equiparable a los bancos del IBEX 35 en cuanto a transparencia del mismo.
La rentabilidad que está obteniendo Bancaja de su negocio financiero básico no le hubiera permitido en los próximos años, en solitario, ir absorbiendo de forma razonable los todavía importantes problemas que tiene pendientes actualmente.
Como muestran los resultados de Banesto del primer trimestre de 2011 la morosidad sigue subiendo, las entradas en mora aunque vayan amortiguándose superan todavía a las recuperaciones, y los activos inmobiliarios adjudicados en el periodo superan ligeramente a las ventas de los mismos. La tendencia va a ser la misma para el resto de entidades financieras en un año muy plano a nivel económico –entre 0,5% y 0,8% de incremento del PIB-, con incremento de tipos por el Banco Central Europeo, riesgo país cercano a los 200 puntos básicos, y rebrote de la competencia para la captación de depósitos.
Las preguntas respecto a Bankia, y sus socios Caja Madrid, Caja Rioja, Caixa Laietana, Caja Segovia, Caja Insular y Caja Ávila son inmediatas:
¿Tiene sentido que Caja Madrid con 5.712 millones de Fondos Propios vaya a tener el 52,1% y Bancaja con 986 millones el 37,7%? Lo mismo en otro orden de magnitud podrían decir las otras cajas.
Bancaja tiene menor rentabilidad, más inmuebles adjudicados y mayor exposición al riesgo inmobiliario. Como botón de muestra al cierre de 2009, última información consolidada auditada, Caja Madrid tenía 2.346 en activos inmobiliarios no afectos a la actividad financiera y Bancaja 5.028 millones, al cierre del 2010 sólo se conocen los activos de Caja Madrid que ascendían a 2.338 millones y los totales declarados por Bankia (incluido Caja Madrid) que eran de 7.402 millones.
¿Caja Madrid y el resto de cajas van a asumir además de menor participación que les correspondería el efecto añadido de una dilución que sería muy, muy inferior si Bancaja no estuviera en Bankia?
¿Quiénes son los propietarios de las Cajas de Ahorro? Una integración basada en una pura proporcionalidad de Inversiones Crediticias, sin tener en cuenta la calidad de los activos, ni la rentabilidad que generan los mismos sería impensable en una negociación entre empresas que se fusionan.
El desarrollo del año 2010 ha puesto de manifiesto que las proporciones de participación inicialmente acordadas, 10 de junio de 2010, no se corresponden con la situación real del negocio.
El paralelismo del Banco Base, donde Caja Astur, Caja Cantabria y Caja Extremadura –iban a ostentar el 60% del accionariado- requieren 519 millones de euros, y la CAM que con el 40% ha solicitado 2.800 millones al Banco de España (proporcionalmente ocho veces más), y el caso de Bankia es evidente.
VIABILIDAD FUTURA DE BANKIA – CAJA MADRID
No cabe duda que Bankia es el mayor riesgo sistémico pendiente de resolver dentro del sistema financiero español, por su enorme tamaño, y con repercusiones enormes en la credibilidad de la reordenación de las cajas de ahorro que está llevando adelante el Banco de España.
La estrategia del Banco de España ha sufrido importante traspiés después de la ruptura del Banco Base por unas razones –la crítica situación de la CAM- , que tienen un paralelismo evidente en la situación límite de Bancaja. Un hecho similar al del Banco Base con Bankia sería crítico para la credibilidad del proceso, y el Banco de España se va a emplear a fondo para que no se repita.
Lejos de resolver los problemas de Caja Madrid, Bankia con la integración de Bancaja los ha incrementado sustancialmente, no sólo por la peor calidad de los activos de Bancaja más impregnados de problemas inmobiliarios, sino además por la bajísima rentabilidad básica de Bancaja, inferior a la ya muy baja de Caja Madrid y el fuerte incremento de fondos adicionales que va a requerir la nueva entidad –de los 5.775 millones de euros unos 3.500 a 3.700 corresponderían a Bancaja-, y la necesidad de negociar con otro interlocutor del tamaño de Bancaja, lo que añade dificultades y retrasos para el adecuado arranque de Bankia y que se manifiesten realmente las potenciales sinergias.
El retraso en realizar los ajustes anunciados y que no se han iniciado, la reducción de gastos generales y corporativos anunciados –que es insuficiente y muy decepcionante-, en una entidad como mucho ruido y pocas nueces, son hechos evidentes.
Para Caja Madrid, con problemas muy importantes y evidentes que no pueden obviarse, el tener que cargar con los problemas de Bancaja –claramente mayores a los de Caja Madrid-, constituye un lastre evidente. Sin Bancaja y con el resto de las cajas podría convertirse en banco, realizar una colocación de equity en entidades como Mapfre a cambio de la alianza en el área de seguros, emitir un bono necesariamente convertible en acciones, y esperar a tener un Equity Story demostrable de buen hacer, cumplimiento de objetivos –llegar a una rentabilidad razonable y atractiva- y transparencia para salir a Bolsa en 2013. Tendría un descuento muchísimo menor que el que va a sufrir en su prevista y precipitada salida a Bolsa, si es que finalmente lo consigue en las actuales circunstancias.
Dificultad del diseño de la salida a Bolsa de Bankia, … Banco Bueno y Banco Malo, … , el intento de que exista un Esquema de Protección de Activos que limite las pérdidas de los inversores, …, la ausencia de una información adecuada y consistente, lo que a estas alturas es preocupante, …