La entidad catalana pone en marcha la primera gran cartera procedente del EPA de CAM: el ''Proyecto Makalu'', de 2.500 millones, que se suma a otra de 900 millones, el ''Proyecto Galerna''
Banco Sabadell pisa el acelerador para zanjar su saneamiento cuanto antes. Después de meses de negociaciones con el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), la entidad catalana ha decidido sacar al mercado su primera gran cartera procedente del esquema de protección de activos (EPA) de CAM. Así, ha distribuido entre los inversores información del ''Proyecto Makalu'', con 2.500 millones en activos de la antigua caja alicantina, según fuentes financieras consultadas por Vozpópuli.
Esta operación está compuesta por activos adjudicados y créditos impagados de empresas y particulares cubiertos por el EPA. Se suma a otra cartera que ya lleva unos días en mercado, el ''Proyecto Galerna'', de 900 millones compuesta por préstamos fallidos.
KPMG asesora a Sabadell en ambas operaciones, que engloban activos y créditos por valor de 3.400 millones.
El grupo presidido por Josep Oliu llevaba meses negociando con el FGD para dar el pistoletazo de salida a estas operaciones. El objetivo es que le sigan otras dos carteras para sumar un total de 12.000 millones y así poner a cero el contador inmobiliario de la entidad. La cuestión no es sencilla porque la venta de estos créditos puede generar un agujero al Fondo que impacte en el déficit estatal.
Plan estratégico
La entidad catalana anunció en su reciente plan estratégico en Londres que mantiene el objetivo de reducir su exposición en activos problemáticos a un ritmo de 2.000 millones anuales. Sólo con el ''Proyecto Makalu'' se superaría con creces esta meta.
Esta partida se situó en 15.200 millones a finales de 2017, y las previsiones son que se reduzca por debajo de los 9.000 millones en 2020: 4.000 millones en créditos dudosos y 5.000 millones en adjudicados. Todo ello sin tener en cuenta las desinversiones que se está trabajando con el FGD.
La cartera ''Makalu'' es la cuarta mayor que saca un banco español en la crisis, por detrás de ''Quasar'' (Popular), ''Marina'' (BBVA) y ''Hércules'' (Catalunya Banc)
El ''Proyecto Makalu'' se convertirá, por el momento, en la cuarta mayor cartera de activos problemáticos que saca un banco español a la venta. Por detrás del ''Proyecto Quasar'' de Popular, de 30.000 millones que compró Blackstone; el ''Proyecto Marina'', de BBVA, con 13.000 millones adquiridos por Cerberus; y el ''Proyecto Hércules'', de 6.400 millones en hipotecas de Catalunya Banc que se quedó Blackstone.
Por su parte, el ''Proyecto Galerna’ es similar al ‘Proyecto Gregal’ que Sabadell vendió hace algo menos de un año a tres fondos: Grove, D. E. Shaw y Lindorff. Se compone de créditos ligados al consumo y sin garantía inmobiliaria que ya han salido de su balance, por lo que todo lo que suma en la venta va directamente a plusvalías.
Precedentes
Junto a ''Gregal'', Sabadell cerró otras dos grandes operaciones el año pasado: ''Normandy'', de 950 millones en crédito promotor que se quedó Oaktree, que también procedía del EPA de CAM; y ''Voyager'', de 800 millones, que compró el mayor fondo de pensiones canadiense.
La operación puesta en marcha por Sabadell se suma a otras recientes de Sareb, BBVA, Cajamar y Kutxabank.