El sector ve complicada la subasta de la caja a pesar de las facilidades del Banco de España
La compra de la CAM sigue siendo una operación arriesgada a pesar de las numerosas facilidades que el Banco de España ha decidido ofrecer a los interesados, incluido un Esquema de Protección de Activos (EPA) que cubrirá la inmensa mayoría de las posibles pérdidas de la entidad durante los próximos diez años. Al menos así lo aseguran las fuentes financieras consultadas, que señalan que el adjudicatario necesitará, en cualquier caso, entre 3000 y 4000 millones para absorber los activos de la caja alicantina. Es decir, ese sería el capital que necesitaría captar el comprador para mantener sus ratios de solvencia tras incorporar a su balance la cartera crediticia de la CAM, según las citadas fuentes. "Es mucho capital para levantar en estos momentos en los mercados", señalan desde una importante entidad española. No hay más que recordar el esfuerzo que necesitó Bankia para conseguir una cantidad similar con su salida a Bolsa el pasado mes de julio. Así, sólo una caja con mucho exceso de solvencia, que pueda permitirse diluirlo, o un banco con mucho músculo podría soportar una operación de este tipo. Esto reduce notablemente la lista de posibles candidatos a los nombres ya conocidos: Santander, BBVA, la Caixa, la fusión de las cajas vascas y algunas entidades extranjeras. La otra opción, que sería trocear la CAM y vender sus distintos activos por separado, no parece ser del agrado del Banco de España, que se encontraría con el problema de no saber dónde colocar los peores de ellos. Consciente de las dificultades de encontrar un nuevo dueño para la caja alicantina, el supervisor financiero está ofreciendo numerosas facilidades a los posibles interesados, tal y como publicó ayer este diario. El más llamativo es un Esquema de Protección de Activos que cubriría la mayoría de los números rojos que generara la entidad durante los próximos diez años. Hasta 2.500 millones de pérdidas, el FROB (el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria) asumiría el 80% y el comprador el restante 20%. Si se supera esa cantidad, el fondo público se haría cargo del 90% del resto de las pérdidas. Además, el FROB también concederá al nuevo dueño de la entidad una línea de crédito de hasta 2.800 millones de euros, que se sumarían a los 3.000 ya concedidos el pasado mes de julio. De esta forma, el Estado pretende que los vencimientos de deuda por importe de más de 5.600 millones de euros que tiene la caja el próximo año no supongan otro problema añadido. Los interesados en pujar por la CAM tienen hasta el próximo día 26 para mostrar sus intenciones. Entonces se realizará una primera criba y los escogidos dispondrán de otras cuatro semanas para realizar sus ofertas vinculantes.
Novacaixagalicia Por otra parte, el presidente gallego Alberto Núñez Feijoo señaló ayer que la Xunta aprobó la transformación de Novacaixagalicia en un banco tras recibir garantías de que la caja conservaría el 15% del capital en vez del 9% establecido inicialmente. |