El consejo de Banco Base aprueba una petición de 2.784 millones de euros que convertiría al Estado en el mayor accionista del grupo
Si CAM y Cajastur deciden seguir adelante con su fusión será el Estado quien se convierta en el principal accionista del grupo. Tal y como estaba previsto, el consejo de administración de Banco Base aprobó ayer la solicitud para que sea el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) quien le inyecte el capital necesario para cumplir con los nuevos requisitos de solvencia del Gobierno; sólo que en lugar del mínimo de 1.447 millones de euros que le marcó el Banco de España, la entidad ha decidido pedir casi el doble, 2.784 millones de euros.
Con esta cifra, el FROB se convertirá inevitablemente en el mayor poseedor de títulos del banco, muy por encima de CAM y Cajastur, y dependiendo de la valoración que finalmente realice el fondo de Banco Base podría incluso acaparar más del 50% de todo el capital. Sin embargo, está por ver que el SIP continúe ya que, aunque la solicitud al FROB se aprobó ayer por unanimidad –a pesar de que la CAM era más partidaria de acudir a Bolsa para conseguir el dinero–, las discrepancias entre la caja mediterránea y la asturiana se mantienen y podrían dar al traste con toda la operación.
Al respecto, desde Oviedo pretendían que la entidad presidida por Modesto Crespo aceptase una reducción de su peso en Banco Base desde el actual 40% hasta el 27%, de forma que Cajastur mantuviese su preponderancia a pesar de la entrada del FROB, algo a lo que se niegan en CAM.
La decisión ahora está en manos de las asambleas generales de las cuatro cajas socias –las dos citadas además de Caja Cantabria y Caja Extremadura– que se celebran mañana. En ellas deben someter a votación la segregación de todo su negocio financiero en favor de Banco Base, lo que supondría convertir la integración en irreversible, una posibilidad cada vez más lejana.
En cualquier caso, la solicitud al FROB se hizo para cumplir con el calendario marcado por el ministerio de Economía y el Banco de España, ya que ayer expiraba el plazo para que todos los grupos que no alcanzasen los nuevos mínimos de capital presentasen un plan para obtenerlo.
Fuentes próximas a la CAM no dudaron ayer en calificar de absolutamente desproporcionada y excesiva la petición de fondos realizada al FROB que, recuerdan, es casi el doble de lo que exigía el organismo regulador del sistema financiero español. Ven tras ello un intento del presidente de Cajastur y consejero delegado del SIP, Manuel Menéndez, por aumentar su control sobre el grupo.
Desde el otro lado, el principal argumento para reclamar una cifra tan elevada son las próximas pruebas de esfuerzo que realizará la UE y que se espera que sean bastante más duras que las del pasado año. Además, también temen que la morosidad de la CAM, que el año pasado ascendió hasta el 8,7%, siga aumentando y se necesiten más fondos para los impagos.
La principal consecuencia de este aumento en la cantidad solicitada es que el porcentaje de acciones que tomaría el FROB sería mucho mayor de lo previsto. Si el fondo aceptara la valoración que las propias cajas hicieron de su negocio (4.583 millones), su participación llegaría al 38% y la de CAM y Cajastur bajaría al 24,8% cada una. Pese a todo, desde CAM reiteraron ayer su voluntad de seguir con la fusión y pedirán a los miembros de la asamblea que voten a favor de la segregación de todo su negocio en favor de Banco Base. |