La Caixa abre el baile de la reestructuración financiera. Así, la caja y su sociedad cotizada, Criteria, han comunicado a la CNMV que hoy se reunirán sus respectivos consejos para analizar, y en su caso, aprobar, la reorganización del grupo. Cuando haya decisión lo comunicarán al mercado, pero se espera la creación de un holding con tres patas: banco, sociedad tenedora de acciones y fundación.
Esta reorganización implicaría la aportación del negocio bancario de La Caixa a Criteria y el traspaso de determinado negocio de Criteria a La Caixa, según el comunicado remitido a la CNMV.
Mientras, los títulos de Criteria permanecen suspendidos desde primera hora de la mañana, cuando subían más de un 3%.
La Caixa y Criteria no han dado detalles, pero en las últimas semanas se ha publicado que La Caixa preparaba su transformación en un holding con tres patas: un banco, una sociedad tenedora de acciones y una fundación. El objetivo sería adaptarse a la nueva ley de cajas y a las nuevas normas de Basilea.
El diseño sería el siguiente: La Caixa traspasará toda su actividad financiera en España a Criteria, que actualmente ya es titular de las actividad financiera del grupo fuera de nuestro país. Posteriormente, Criteria se convertirá en un banco y adoptaría un nombre similar al de sus matriz (por ejemplo, Caixa Bank).
La ventaja de esta operación es que Criteria ya cotiza en los mercados de valores y de esta forma el nuevo banco podría obtener nuevos recursos con facilidad.
El diario El Confidencial apunta esta mañana que Juan María Nin, actual director general de La Caixa, sera el consejero delegado de este nuevo banco, mientras que Isidro Fainé, presidente de La Caixa, será el presidente de este nuevo banco.
¿Controlará el banco una Fundación?
La segunda rama la desempeñará una sociedad tenedora de acciones en la que el grupo traspasará todas su participaciones industriales (Gas Natural, Repsol, Abertis, Agbar, etc.).
Gracias a esta fórmula, La Caixa no se verá tan perjudicada por las nuevas normas de internacionales de solvencia que penalizan las participaciones industriales propiedad de entidades financieras.
Finalmente, del holding también dependerá la Fundación La Caixa que seguirá realizando la obra social del grupo y que se nutrirá de los dividendos que reparta el banco del que el holding tendría una participación superior al 80% del capital. |