María Dolores Amorós y Roberto López Abad dos grandes ejemplos de falta de profesionalidad.
María Dolores Amorós, ex directora general de la CAM, es otro de los grandes ejemplos de la falta de profesionalidad de los gestores que llevaron a algunas de las grandes cajas de ahorros españolas al desastres. Fue despedida por el FROB por falsear las cuentas el ejercicio 2010 con el aval de una sentencia de un juzgado de Alicante en la que entre otras cosas la acusaba de recurrir a las filiales del grupo para engordar las cuentas del grupo. Pese a ello, aseguró que “Nunca he tenido nada que ver con la contabilidad de la Caja ni con las titulizaciones. Todo dependía de épocas anteriores” y que "el ámbito de mis competencias, a partir del ejercicio 2007, se centró en el diseño e implementación de la estrategia de márquetin y la estrategia comercial".
El anterior director general, Roberto López Abad, (Alcoy, 1956), fue quien diseñó la salida a bolsa de la CAM a través de las cuotas participativas. “Dirigir la CAM es mentira, esto es una máquina que va sola”, llegó a asegurar en público. La operación fue colocada íntegramente en la red del banco. "El esquema de toma de decisiones de los órganos de gobierno de la CAM está perfectamente estructurado, y los niveles de transparencia de la entidad han seguido estándares muy altos en comparación con el sector", decía entonces a todo el que quisiera escucharle este ejecutivo, que se incorporó a la CAM con apenas quince años, al tiempo que seguía sus estudios en Ciencias Económicas y Empresariales en la Universiad de Valencia.
Desde entones han pasado 38 años y el resultado ha sido que lo los inversores de la CAM lo han perdido todo. Banco CAM fue comprado por Banco Sabadell al precio simbólico de un euro, al mismo tiempo que el Fondo de Garantía de Depósitos ampliaba capital por 2.449 millones de euros. “(La emisión de cuotas) se ajustó siempre a la legislación y estuvo atentamente supervisada por el Banco de España y la Comisión Nacional del Mercado de Valores”, fue la justificación de Abad.
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