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“En lo referente a la ley hipotecaria, hay que distinguir el problema social del marco legal”. Para el presidente del Banc Sabadell, Josep Oliu, existe una línea roja en lo que pide la Plataforma de Afectados por las Hipotecas: “No puede haber cambios legales con efectos retroactivos porque mostraría inestabilidad jurídica y pondría en peligro la credibilidad del país”. Así lo ha alertado el directivo de la entidad durante una nueva sesión de Matins ESADE patrocinada por Ernst&Young y con la colaboración de La Vanguardia.

Durante la conferencia, Oliu se ha mostrado negativo en cuando a la fluidez del crédito y ha dicho que seguirá bajando en el conjunto del país en 2013, en 2014 e incluso hasta 2015. Lo que para él es algo “bueno” porque el país debe desendeudarse antes de volver a pedir prestado. Por ello, cree que no volverá a fluir hasta que lleguemos a una tasa de desapalancamiento “sostenible”. En este sentido, el problema para el directivo es la falta de demanda. "Tenemos capacidad para dar créditos, pero hay dificultad para encontrar clientes que puedan acometer nuevas aventuras con credibilidad. Ahora ya hay agua pero no hay nadie al otro lado que abra el grifo”, ha expresado.

 Así, ha explicado que Banc Sabadell se ha marcado como objetivo crecer en crédito. En esta línea, ha apuntado que la entidad ha aumentado su capacidad de crédito más de un 33%, por encima del sistema, que ha bajado un 20%.

 Josep Oliu considera que el sector inmobiliario en España ha tocado fondo: “los precios han alcanzado cifras bajas y no van a bajar más”, ha asegurado. Asimismo, cree que es “falso” que la SAREB o “banco malo” vaya a bajar los precios de las viviendas”. “Ya veremos cómo va pero en 15 años no va a vender stock a precios tan bajos”, ha recalcado.

 En cuanto a las previsiones de crecimiento, el directivo ha indicado que 2013 seguirá siendo un año de recesión. “Hay elementos que nos permiten decir que los efectos negativos de la crisis podrán rebajarse a finales de este año o a principios de 2014, lo que dependerá de que se mantengan las reformas y la estabilidad económica”, ha augurado.

 Oliu ha reconocido la necesidad del ajuste fiscal en España, pero ha añadido que la política actual está teniendo un efecto "distorsionante" que debe tener una duración limitada en el tiempo para no perjudicar el desarrollo empresarial.

 Por otro lado, ha afirmado que ha mejorado la percepción de España en el exterior. En este sentido, prevé que “en 2013 el entorno financiero va a ser más benigno y el ajuste fiscal será menos severo que en2012”.

 Igualmente, ha hecho referencia al rescate de Chipre como un episodio  que “no tiene mayor importancia”. Lo que sí la tiene, en su opinión, es el ajuste económica europeo hacia su equilibrio.  “Si alguna lección nos da el caso de la isla chipiotra es que tenemos que tener cuidado con los paraísos fiscales”, ha matizado.

 El próximo horizonte de Banco Sabadell pasa por "rentabilizar" su nuevo posicionamiento. Tras duplicar su tamaño durante la crisis y de consolidar la solvencia y la liquidez; los activos del banco eran de unos 70.000 millones en 2007, y augura que al final de la crisis sean de 200.000. Una cifra a la que se acercará con la integración del negocio dela antigua Caixa Penedèsy el capital principal del 11%.

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