Los recortes sólo afectarán finalmente a 1.250 trabajadores de la entidad, 500 menos de los previstos inicialmente
david navarro
En el último momento y cuando el plazo legal ya estaba a punto de expirar, los sindicatos y la dirección del SabadellCAM lograron cerrar un acuerdo sobre las condiciones del Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que la entidad aplicará el próximo año. Finalmente, serán 1.250 los trabajadores afectados por el recorte, frente a la previsión inicial de 1.750, de los que más de la mitad -710- se marcharán a su casa prejubilados. El resto se intentará repartir entre bajas incentivadas y suspensiones temporales de contratos para evitar que haya despidos forzosos o que éstos sean los menos posibles.
Desde el Sabadell calificaron de "histórico" el acuerdo alcanzado, mientras que los sindicatos destacaron como principal logro la reducción en el número de los afectados. Al final, tras muchos desencuentros a lo largo de la noche, el pacto fue unánime.
En cuando a las condiciones acordadas, los prejubilados cobrarán el 80% su sueldo neto hasta un máximo de 245.000 euros y tendrán cubierta la cotización a la Seguridad Social hasta los 63 años, cuando podrán pasar al retiro definitivo sin ver mermada su pensión. Además, tendrán una prima de 12.000 euros para su fondo de pensiones.
Los que acepten las suspensiones temporales de contrato cobrarán al inicio 20 día por año trabajado con un mínimo de 10.000 euros y, si transcurridos dos años la empresa no les ofrece la reincorporación, percibirán la cantidad restante hasta alcanzar una indemnización legal por despido improcedente más una compensación adicional de 10.000 euros. Por último, los que se sumen a las bajas incentivadas percibirán un mínimo de 35 días por año trabajado más una "prima de enganche" que irá desde los 10.000 hasta los 15.000 euros. El mínimo serán 30.000 euros y el máximo 150.000.
Tras algunas reuniones preliminares, las negociaciones oficiales del ERE del SabadellCAM arrancaron oficialmente el pasado 28 de agosto, cuando la entidad señaló que sería necesario suprimir 1.751 empleos en la matriz y otros 441 en las empresas participadas -que se abordarán más adelante- para cumplir la hoja de compromisos firmada con la Comisión Europea. Las conversaciones no fueron nada fáciles desde un principio y los representantes de la plantilla calificaron de "ofensiva" la primera propuesta de la empresa, que incluía el despido de más de un millar de trabajadores con sólo 20 días por año de indemnización, el mínimo que marca la legislación.
Poco a poco las posiciones fueron acercándose hasta conseguir el acuerdo de ayer, que podrían marcar el camino para las próximas reducciones de personal que se avecinan en el sector de la banca.
El recorte de plantilla es uno de los puntos clave del plan de reestructuración que aprobó Bruselas para autorizar la integración de CAM en el grupo Sabadell con el objetivo de garantizar la viabilidad del proyecto, un plan que también exige el cierre de 450 oficinas para evitar distorsiones en la libre competencia.
La entidad catalana resultó adjudicataria de la subasta que organizó el FROB tras intervenir la antigua caja alicantina el 22 de julio de 2011. Pagó un simbólico euro y a cambio recibió 5.400 millones en ayudas iniciales y un esquema de protección que cubre el 80% de las pérdidas que generen los activos más problemáticos de la CAM -aquellos vinculados al ladrillo- sobre un perímetro total de 24.000 millones. El nuevo grupo resultante fue una de las siete entidades que superó la auditoría realizada por la consultora Oliver Wyman a la banca española.
|