Las necesidades de liquidez de la CAM, que algunos de los potenciales compradores van a pedir al Banco de España, se elevan a 24000 millones de euros, según fuentes conocedoras de la situación; Esa es la cifra que la entidad que se quede con la caja alicantina tendrá que refinanciar en los mercados de capitales; Una suma ingente de dinero a levantar a corto y medio plazo a la que el Ministerio de Economía ayudará con emisiones avaladas por el Estado, lo cual suscita dudas entre los interesados
El Confidencial adelantó en septiembre que las urgencias de liquidez ascendían a 16500 millones entre vencimientos de deuda que hay que refinanciar y la apelación de la entidad al BCE; Concretamente, la CAM tiene vencimientos de deuda por importe de 1413 millones en 2011, por 5925 millones en 2012 (cuando expira la deuda avalada por el Estado) y por 1848 millones en 2013; en total, 9186 millones.
A eso hay que añadir la apelación al Banco Central Europeo de la caja, que es una de las mayores de la banca española si no la mayor: 7.342 millones al cierre de junio, el 15,5% de los 47.455 millones del conjunto de las entidades nacionales en esa fecha. Sumando ambos conceptos, las necesidades de liquidez de la entidad alicantina ascienden a 16.528 millones.
Pero los finalistas de la subasta, BBVA, Santander, Caixabank, Sabadell, JC Flowers, Ibercaja y Barclays, han descubierto que aún hay más. La CAM ha recibido préstamos de otros bancos, a través del interbancario, por valor de otros 7.487 millones que también tiene que devolver o refinanciar. Si lo sumamos, se alcanzan 24.015 millones. Y las fuentes consultadas aseguran que algunos de los candidatos van a solicitar ese importe al Banco de España.
El grueso de la posición en el BCE y en el interbancario tiene un vencimiento inferior a un mes: 5.700 millones en el primer caso y 5.000 en el segundo. Estas cantidades deben refinanciarse constantemente y no son adecuados para atender vencimientos de deuda a largo plazo. Por eso, algunos expertos consultados aseguran que son conceptos diferentes y no pueden añadirse a la deuda a largo plazo. Ahora bien, "es lógico que los bancos que pujan por la CAM soliciten todo al FROB, otra cosa es que se lo den", admiten.
Tomar los vencimientos de los próximos tres años responde a que "es el período mínimo que te piden los mercados para plantearse prestar dinero a la entidad que absorba la CAM; si no tienes eso cubierto, olvídate", según una de las fuentes consultadas. En todo caso, ahí no terminan los problemas de liquidez de la caja, ya que tiene vencimientos por 12.132 millones más allá de 2013.
Deuda avalada para reducir el coste del Estado
Por otro lado, el Banco de España está intentando reducir el coste para el erario público de la liquidez necesaria para vender la CAM. Así, las fuentes citadas aseguran que ha propuesto a los interesados sustituir la línea de crédito del Estado que se había planteado inicialmente por emisiones con aval para refinanciar los vencimientos de deuda. Con esta fórmula, sólo habría que poner dinero público en caso de impago, algo muy improbable dada la fortaleza de los candidatos.
Esta solución es mucho menos satisfactoria para los potenciales compradores, ya que el aval del Estado no garantiza que se puedan colocar esas emisiones: nadie ha podido emitir con aval o sin aval desde marzo (salvo BBVA hace unas semanas, que logró colocar 750 millones) y la prima de riesgo de España alcanzó ayer 460 puntos básicos. Por tanto, aunque se logre colocar, el tipo de interés que tendría que pagar el comprador sería muy elevado. En consecuencia, los candidatos prefieren que el FROB les conceda esa liquidez directamente para irla devolviendo de forma escalonada
2.000 millones de riesgo
Este esquema tiene un escollo aún más por resolver. Se trata de emisiones de deuda senior por unos 2.000 millones colocada entre la banca internacional -con un alto porcentaje para JP Morgan, según las fuentes- que quedará fuera de los avales del Estado. Esta cantidad tendría que ser refinanciada ´a pulmón´ por el comprador con su propia liquidez.
En la puja, que se cerrará el 24 de noviembre, la liquidez será una de las variables más importantes: cuanto menos dinero se solicite, más posibilidades de llevarse el gato al agua. Las otras variables son las garantías contra pérdidas futuras y si alguien piensa devolver parte de los 2.800 millones de capital público que el FROB ha tenido que inyectar. Ese es el único coste que, a priori, la quiebra de la CAM tendrá para los ciudadanos. |