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Cani Fernández, presidenta de la CNMC.EXPANSION |
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La Cámara de Comercio de Barcelona y el Consejo General de Cámaras de Cataluña cierran la lista de organizaciones que han solicitado personarse en el expediente abierto por la Autoridad de Competencia.
Más de 15 entidades han anunciado públicamente su personación en el expediente abierto por la Autoridad de Competencia, la CNMC, en relación con la opa hostil de BBVA sobre Sabadell, cuyo plazo ya ha expirado.
Todas ellas pueden presentar ante la CNMC sus alegaciones a favor o en contra de la operación. El proceso no es automático. Competencia debe verificar previamente si reúnen los requisitos de legitimidad exigidos para tener voz en este proceso.
La mayoría de las peticiones procede de patronales empresariales, preocupadas por la posible restricción del acceso al crédito que puede suponer la desaparición de Sabadell, con el que trabaja una de cada dos pymes en España. También temen que el poder de mercado de BBVA tras la fusión provoque un encarecimiento del crédito.
El primero en personarse fue el propio Sabadell. Después Pimec, una asociación catalana que representa los intereses de pymes y autónomos. "La financiación es el oxígeno de las pymes. Si hay menos oferta bancaria sufrirán un encarecimiento de los costes empresariales", denunció su presidente, Antoni Cañete, su presidente, hace unos días.
En su opinión, la desaparición de Sabadell afectará a los clientes con peores precios y servicios financieros, una menor remuneración de los depósitos y un encarecimiento de las comisiones. Según sus datos, si triunfa la opa podría recortarse un 8% la disponibilidad actual de crédito a las pequeñas empresas.
Las otras dos grandes patronales catalanas, Foment del Treball y Cecot, tienen una opinión similar y presentarán alegaciones.
Las cámaras de comercio también se han movilizado para evitar la desaparición de Sabadell. Entre ellas, la Cámara de Comercio de Barcelona, la última en personarse.
Según el análisis preliminar de la CNMC, los posibles problemas de abuso de posición dominante de esta operación empresarial se concentran en Cataluña y en la Comunidad Valenciana.
La suma de BBVA y Sabadell tendrá cuotas de mercado superiores al 30% en todos los productos de banca minorista. Si hay fusión, BBVA y CaixaBank controlarán tres cuartas partes de las sucursales bancarias en Cataluña.
La Autoridad Catalana de la Competencia, la ACCO, alertó pocos días después del lanzamiento de la opa de BBVA del gran riesgo de concentración que puede provocar en el mapa bancario. Se trata de un organismo independiente que depende del parlamento catalán. Su misión es mejorar y promover la competencia y la transparencia en los mercados.
Según sus estimaciones, BBVA y Sabadell juntos controlarán el 39,63% del crédito bancario en Cataluña y superarán a CaixaBank (32,41%).
La ACCO denuncia que apenas cuatro bancos se reparten actualmente el mercado catalán. "Reducirlo a tres implicaría un mayor poder para fijar precios y una menor capacidad de elección por parte de los consumidores. La entidad resultante ganaría solidez poniendo en riesgo la competencia", indica Roger Lopaccher, su presidente.
Los dos sindicatos mayoritarios en España, UGT y CCOO, creen que esta operación provocará un importante recorte sobre el empleo.
BBVA guarda con celo ese dato. La única pista que ha dado al respecto es que los ahorros de costes derivados del ajuste de personal que acometerá durante la fusión ascenderán a 300 millones. Basándose en este dato, Sabadell calcula que el adelgazamiento de plantilla puede ascender a 4.000 empleos, el 9,4% del banco fusionado.
Próximos pasos
Cuando finalice esta fase de alegaciones, la CNMC procederá a pedir informes de competencia a las Comunidades Autónomas afectadas por esta operación.
También encargará un test de mercado para comprobar la eficacia de las medidas propuestas por BBVA para suavizar el efecto de la fusión en la reducción de la competencia.
Se calcula que la CNMC publicará su dictamen en la primavera de 2025. |
