Sabadell pasa otra factura de 981 millones por los activos dañados de CAM, mientras que BBVA solicita un primer desembolso de 207 millones por Unnim
El Fondo de Garantía de Depósitos (FGD), que cubre el ahorro de los depositantes y se nutre con las aportaciones del sector, sigue absorbiendo el quebranto por el salvamento de bancos en la crisis. El Fondo desembolsará este año 1.188 millones por una nueva liquidación de los Esquemas de Protección de Activos (EPA) concedidos a Sabadell y BBVA para cubrir las carteras dañadas de CAM y Unnim, respectivamente. Desde 2009, el FGD ha comprometido unos 22.000 millones de euros entre inyecciones de capital a entidades, aportaciones al patrimonio del Fondo público de Reestructuración (Frob), dinero para el rescate de los preferentistas de Catalunya Banc y NCG, y las posibles pérdidas de los EPA.
Colchón agotado
El Fondo abonó en febrero a Sabadell 981 millones como segunda liquidación por la cobertura de la cartera deteriorada de CAM, según las cuentas anuales de 2016 del FGD. Se añaden a los 825 millones desembolsados un año antes, lo que eleva el saldo conjunto a 1.807 millones.
Sabadell se adjudicó CAM en 2011 por un euro y con un doble respaldo del Fondo de Garantía: una inyección de capital de 5.249 millones y un EPA sobre una cartera de 24.644 millones, que tenía en origen provisiones por 3.882 millones. Una vez agotado ese colchón, el Fondo cubre, mediante liquidaciones anuales hasta 2021, el 80% de las necesidades de nuevos saneamientos (981 millones este año). Sabadell se hace cargo del 20% restante (en torno a 200 millones).
A su vez, el FGD, como hace todos los ejercicios, ha actualizado la estimación sobre el deterioro que sufrirá durante los diez años de vida del EPA. La última previsión de los expertos independientes sobre la pérdida esperada de la cartera asciende a 11.272 millones, de los que 5.911 millones serían absorbidos por el Fondo de Garantía. Son 343 millones menos que en 2015, por "la positiva evolución de las ventas de suelo en 2016", indican las cuentas. No obstante, el organismo, "en previsión de que en el futuro no persistiera esta positiva evolución de las ventas", ha calculado la pérdida asumiendo los mismos niveles de deterioro del suelo. Este escenario ha situado el quebranto en 11.558 millones, con una pérdida de 6.141 millones para el FGD.
BBVA, por su parte, también ha iniciado la petición de desembolsos por el EPA de Unnim. El banco ha remitido una primera liquidación, por la que el Fondo tiene previsto abonarle 207 millones el 30 de junio. Como Sabadell, BBVA adquirió Unnim hace seis años al precio de un euro y con apoyo del FGD: 953 millones como inyección de capital y un EPA que cubre activos por 7.359 millones. Consumidas las provisiones por 1.330 millones que se constituyeron en su día, el Fondo se apunta el 80% del deterioro añadido (los citados 207 millones de momento), y BBVA otros 53 millones, el 20%.
Por lo que respecta a la pérdida esperada de la cartera de Unnim, suma ya 3.602 millones. De éstos, 1.817 millones serán soportados por el Fondo, 84 millones más que el cálculo de cierre de 2015.
El FGD, por último, dotó el pasado año otros 433 millones por el EPA concedido a Liberbank por la adquisición en 2009 de la antigua Caja Castilla-La Mancha. De este modo, el quebranto para el Fondo se eleva a 2.475 millones, el máximo previsto en el contrato. El EPA venció en diciembre y actualmente está abierto el proceso de cálculo de la pérdida definitiva.
El deterioro de CCM fue el principal lastre del FGD en 2016. Con todo, y una vez asumido el grueso de la factura por la crisis bancaria en ejercicios previos, el Fondo tuvo un resultado positivo de 468 millones en 2016. Pone fin a cinco años de números rojos con pérdidas por 11.200 millones. No obstante, el auditor, Grant Thornton, señala en un párrafo de énfasis que la suficiencia de las provisiones constituidas para los rescates dependerá del "cumplimiento efectivo de las hipótesis clave utilizadas, así como de la evolución futura de las contingencias cubiertas".