El Banco Sabadell ha celebrado este miércoles su reunión anual de directivos, donde se ha fijado para los próximos cuatro años poner el foco en la integración del banco británico TSB, las transformaciones en ámbito comercial, digital y de balance, y los retos de crecimiento en España, Reino Unido y México.
La reunión, que ha congregado a más de 1.600 directivos de la entidad de toda España, ha servido para exponer los resultados del último plan estratégico Triple 2014-2016, así como para apuntar las líneas de actuación de los próximos cuatro años, ha informado la entidad en un comunicado.
El presidente del Sabadell, Josep Oliu, ha hecho balance del plan: "Hemos conseguido mucho, aunque hemos de buscar la excelencia", ha sostenido, y el consejero delegado Jaime Guardiola ha expuesto que la entidad debe ser líder en experiencia al cliente, además de resaltar la importancia de reducir costes y mantener precios.
Durante 2017, el banco pondrá sus esfuerzos en cumplir con "retos fundamentales", como la culminación de la integración tecnológica de TSB, la transformación comercial, la reducción de costes o la reducción de activos improductivos, con miras a partir de ese momento al desarrollo de una planificación exhaustiva que tiene como horizonte los años 2018-2020.
Las prioridades para TSB serán "la migración que tendrá lugar a finales de 2017 con la implantación de herramientas digitales y de la plataforma", además de que el banco debe aprovechar las capacidades del grupo con una autonomía centrada en el negocio, que ayude a la escalabilidad con crecimientos en hipotecas y cuentas, y que mejore la eficiencia a través de sinergias de migración y mejora de costes.
EN MÉXICO
En cuanto a México, Oliu ha detallado que tanto en banca corporativa como en la de empresas existe un "ambicioso" plan de crecimiento, que se unirá a la construcción de una plataforma de arranque de negocio de banca personal.
Las prioridades en España serán "el incremento del volumen de negocio y el margen, la rentabilidad y la transformación comercial con el foco en el cliente, el aumento del Roe hasta apuntalar el porcentaje en dos dígitos", junto a una gestión centrada en el valor de los activos improductivos, que llevará en los próximos años a seguir reduciendo la mora que ya a finales de 2017 se espera que esté por debajo del 5%.
Respecto a la generación de resultados, las estimaciones del Banco Sabadell apuntan de cara al próximo año a una estabilización en línea con lo previsto en el cierre de 2016.
Según Oliu, la coyuntura macroeconómica estará marcada por un crecimiento mundial reducido en un entorno donde "el factor político será fundamental", con una inflación en evolución creciente y políticas fiscales que respaldarán la actividad.