La sentencia emitida por el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 de Ponferrada obliga a la entidad a devolver los más de 3.000 euros invertidos por el denunciante y hacer frente al pago de las costas judiciales .
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 2 ha dictado la primera sentencia en Ponferrada que condena al Banco Sabadell por las cuotas participativas emitidas por la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM). El auto emitido el 13 de julio estima íntegramente la demanda, declara la nulidad de la orden de compra de cuotas participativas emitidas por la Caja de Ahorros del Mediterráneo, y condena al Sabadell (sucesor de la CAM) a la restitución del capital invertido y al pago de las costas procesales.
El clienta denunciante solicitó a la entidad la supresión de las acciones participativas en las que había invertido algo más de 3.000 euros presentando varios escritos en la oficina central de Ponferrada que no fueron atendidos, lo que le llevó a optar por la vía judicial para reclamar su dinero.
Se trata de un caso seguido bajo la dirección letrada del abogado ponferradino Marco Antonio Morala López de la firma Irago Legal desde donde recuerdan que el Banco de España las define como "activos financieros o valores negociables que pueden emitir las cajas de ahorros". La emisión de estas cuotas permite a estas entidades, reforzar sus balances y captar capital.
Precisamente en julio de 2008, la CAM se convirtió en la primera caja de ahorros en emitir estas cuotas participativas, que vendieron entre sus clientes y a sus empleados.
Cabe recordar que Caja Mediterráneo y el acrónimo CAM fueron las marcas comerciales de Caja de Ahorros del Mediterráneo, una de las tres cajas de ahorros de la Comunidad Valenciana existentes antes de la desaparición de Bancaja y de la propia CAM.
El 22 de julio de 2011 fue intervenida -nacionalizada- por el Banco de España, que cesó a los administradores de la entidad para auditarla, recapitalizarla y abrir un proceso de subasta para su adjudicación.
La setencia es firme. El letrado Marco Antonio Morala López ha manifestado su "satisfacción profesional y personal por el resultado obtenido". |