El exdirector general de Participaciones Empresariales de la CAM Joaquín Meseguer ha denunciado que las "injerencias políticas" debilitaron la caja, ya que las "distintas sensibilidades" de los consejeros desviaban la gestión a la búsqueda de "influencia" en asuntos como préstamos "a amigos" o inversiones empresariales
Meseguer ha comparecido hoy en la comisión de Les Corts Valencianes que investiga la intervención de la CAM por el Banco de España, donde ha explicado que perteneció casi 36 años a la entidad, 30 en puestos de dirección y 25 como miembro del comité de dirección, y que nunca podrá entender la intervención de la CAM.
También ha comparecido el exdirector general de Recursos Humanos Vicente Soriano, quien se ha negado a contestar a las preguntas por estar imputado judicialmente, negativa que han criticado todos los grupos parlamentarios.
Meseguer ha resaltado entre los factores que condujeron a la situación de la Caja la renovación de los órganos rectores de 2007, cuando la "pelea enconada por copar el poder" dio una imagen "desastrosa" y debilitó ante la clientela "la confianza necesaria para desarrollar el negocio".
También ha precisado que "vinieron unos señores, los mejores del mundo en estrategia comercial", y les convencieron de que había que ser eficientes en el crecimiento, lo que supuso una "debilidad", además de la falta de capacidad para encontrar acuerdos con otras entidades.
Meseguer ha criticado además a quienes no devolvieron los préstamos porque les interesó más no pagar, no porque no pudiesen, con lo que "han engañado a la Caja y han contribuido de forma clarísima" a sus problemas, y ha enumerado la "debilidad" del liderazgo político autonómico, empresarial y del Gobierno central como otros factores.
Ha reivindicado que desde 2007, cuando fue nombrado director de Participaciones empresariales, hasta 2010, en que se prejubiló, desarrolló una función "importante" pero "auxiliar", dado que "no estaba en el campo de batalla", pues en ese momento ya no se dedicaba a las áreas financieras ni comerciales.
Meseguer ha asegurado que "siempre" se leyeron las actas del Banco de España cuando así se exigía, aunque ha indicado que, a semejanza de la escritura de una hipoteca, son textos "complicados", y por ello cuando se transmitía la información al consejo de administración "se plasmaba en presentaciones para explicarlo".
El exdirectivo ha asegurado que nunca participó "lo más mínimo" en la fijación de sus condiciones laborales ni en el cálculo de indemnizaciones, retribuciones o incentivos, y ha negado la imagen que se ha querido dar de que había un "compadreo para sacar dinero a la Caja".
Además, ha dicho que para él fue una "sorpresa" y no le "gustó nada" saber que al prejubilarse tenía que cobrar de golpe las retribuciones de los nueve años que le quedaban hasta la jubilación, pero le dijeron que "beneficiaba a la Caja" y finalmente acordó dejar todo el dinero en la CAM y que mensualmente le ingresaran una cantidad.
Meseguer ha admitido que firmó en marzo de 2011 un documento predatado en noviembre de 2010 para acceder a los 56 años a la prestación adicional asegurada fijada para la jubilación a los 65, aunque ha asegurado que en su caso le "perjudicaba", pues le suponía una pérdida de derechos.
Ha reivindicado que la CAM ha sido una entidad "muy profesional", que ha llevado un "absoluto control de todos los riesgos", y ha manifestado que, por "más vueltas" que le ha dado, sigue "sin comprender qué pasó" para que fuera intervenida.
Soriano ha seguido desde la sala de prensa de Les Corts la intervención de Meseguer, quien posteriormente ha hecho lo mismo con la comparecencia de Soriano.
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