El Banco de España ha dado un paso más para desincentivar la ´guerra del pasivo´ que libran las entidades financieras para captar financiación minorista al reducir el umbral de los tipos de interés de los depósitos a partir de los cuales hay que realizar aportaciones adicionales al Fondo de Garantía de Depósitos (FGD)
Ep - Madrid - 08/04/2012 - 12:39
Con el telón de fondo de la escasez de recursos del FGD, que se emplea para financiar los rescates de entidades intervenidas, el organismo que preside Miguel Ángel Fernández Ordóñez ha establecido unos nuevos tipos de interés de referencia para el primer trimestre de 2012 que son inferiores a los anteriores.
Concretamente, las entidades financieras deberán hacer una aportación adicional al FGD si ofrecen un tipo de interés superior al 2,45% anual para los depósitos a plazo igual o inferior a tres meses, y al 2,84% para aquellos a plazo superior a tres meses e inferior a un año.
En el caso de los depósitos a plazo igual o superior a un año, el umbral del tipo de interés anual de referencia es el 2,67%, y para los disponibles en cuentas a la vista, el 1,64%, según figura en una disposición del Banco de España.
Se trata de la tercera vez desde octubre de 2011 que el Banco de España rebaja la remuneración máxima de los depósitos a partir de la cual las entidades han de hacer aportaciones adicionales al FGD. Así, el tope ha bajado entre 0,74 y 0,44 puntos porcentuales para las cuatro categorías de depósitos.
El sector financiero se encuentra a la espera de la posibilidad de que se le exija una derrama, una aportación extraordinaria o un adelanto de las cuotas anuales que realiza al FGD ante la escasez de recursos de éste, ya que está previsto que se siga utilizando para costear las tres subastas: Banco de Valencia, Catalunya Caixa y Novacaixagalicia.
El Gobierno ya había planteado esta posibilidad al sector financiero, lo que ha soliviantado a las entidades de mayor tamaño, especialmente a Santander y Caixabank, después de que el FGD costeara la adjudicación de Unnim a BBVA, por considerar que están sufragando la expansión de un competidor.
Con estos mimbres, y después de que Unicaja recibiera ayudas públicas del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) para la compra de Caja Duero España, la patronal de la banca reclamó recientemente al Gobierno que aclarara si las siguientes adjudicaciones las afrontará el FGD o el FROB.
El FGD se nutre de las aportaciones privadas del sector financiero a razón del 2 por mil de los depósitos al año, con la posibilidad de incrementarla hasta el 3 por mil, según estableció por norma el anterior Ejecutivo socialista.
Su objetivo fundacional es garantizar los ahorros de los depositantes, pero el Gobieron amplió su función, para que afrontara los rescates de entidades con el fin de minimizar el coste para el contribuyente de la reestructuración financiera española.
A falta de datos oficiales, fuentes financieras consultadas por Europa Press cifran los recursos del FGD en menos de 2.000 millones de euros, cantidad insuficiente para afrontar esta adjudicación, máxime tras la cobertura por las pérdidas registradas por la CAM a partir del pasado 1 de agosto de las que se beneficia el Sabadell, por importe de 715 millones de euros. |