Las cuentas echadas por el Banco de España entre 2009 y 2012 para adjudicar, bajo un Esquema de Protección de Activos (EPA), Caja Castilla-La Mancha (CCM), CAM y Unnim, han saltado por los aires.

Como se esperaba, los 7.700 millones de provisiones que el Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) -soportado directamente por las entidades financieras e indirectamente, al final, por los clientes- se han quedado cortos para hacer frente al incremento progresivo de las pérdidas esperadas por los activos problemáticos.

Al margen de la protección que el FGD concedió a Liberbank para adquirir CCM por un máximo de 2.475 millones de euros, y que, tras vencer el pasado 31 de diciembre de 2016, está pendiente de liquidación, tanto el Banco Sabadell como el BBVA se han visto obligados a activar estas coberturas sobre la CAM y Unnim, respectivamente, cuando todavía quedan 4 años, hasta 2021, para que las protecciones venzan.

De momento, agotadas las provisiones de 3.882 millones que el FGD destinó a cubrir las pérdidas de los activos de la CAM adquiridos por el Sabadell, y los 1.330 millones provisionados para cubrir al BBVA de los activos de Unnim, han sido ya 2.077 los millones activados en el marco de esa protección.

Reparto de las facturas de los EPA 

¿Quién paga estas facturas? El 80% el propio Fondo de Garantía de Depósitos y, el 20% restante, las entidades propietarias de las antiguas cajas rescatadas. El Sabadell ya ha girado y cobrado dos facturas por un total de 1.817 millones. Como el fondo se ha hecho cargo de 1.454 millones, la entidad presidida por José Oliu ha tenido que desembolsar algo más de 363 millones.

Por su parte, el BBVA ha remitido al FGD la primera liquidación, comunicando que las pérdidas de la cartera cubierta excede, hasta el pasado 31 de diciembre, en casi 260 millones de euros los 1.330 provisionados en octubre de 2011.

El BBVA pide 208 millones y asume 52

Así, el banco presidido por Francisco González ha pedido que le sean reintegrados casi 208 millones, asumiendo el banco los 52 restantes. Está previsto que el fondo realice este pago el próximo 30 de junio, según se recoge en el informe anual aprobado el pasado 18 de mayo.

Para saber el importe total del rescate, tanto de la CAM como de Unnim, habrá que esperar a las liquidaciones que, hasta 2021, realicen tanto el Sabadell como el BBVA, en virtud de estos esquemas de protección.

Protección de activos a sumar al capital inicial

El monto de lo que finalmente se pague por estas liquidaciones se sumará a las inyecciones de capital que inicialmente realizó el Fondo de Garantía de Depósitos para reforzar el capital de estas cajas rescatadas y evitar su quiebra. En la CAM fueron de 5.249 millones y ascendieron a 948 millones en el caso de Unnim.

Hace un año, tras la primera liquidación realizada por la EPA de la CAM, el Banco Sabadell echaba cuentas en su informe anual del ejercicio 2015. Y llegaba a la conclusión de que el importe a pagar por el Fondo de Garantía de Depósitos rondaría los 11.000 millones de euros, muy por debajo de los 15.000 millones que, en 2014, había estimado el ministro de Economía, Luis de Guindos.

Costes: 1.300 millones el Sabadell y 350 el BBVA 

Dando por buenos esos datos de la propia entidad vallesana, serían unos 1.300 millones los que el Sabadell debería ‘comerse’ por la CAM. O sea, casi unos 1.000 millones más de los más de 360 ya abonados tras las dos primeras liquidaciones.

En el caso del coste de rescatar Unnim, y según la actualización hecha por el fondo al cierre del ejercicio 2016, la factura rondaría los 2.800 millones de euros, al sumar los casi 1.000 millones inyectados hace seis años a los 1.800 millones de pérdidas asumir en el marco de la EPA, de los que el BBVA afrontaría unos 350 millones.