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La ministra de Economía, Nadia Calviño Agencia EFE |
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Los dos bancos con garantías públicas en vigor ofrecen asumir algo más del 20% que les toca por contrato. A cambio venderán de forma acelerada a fondos las carteras de Unnim y CAM
Las negociaciones del Fondo de Garantía de Depósitos (FGD) con la banca están cerca de llegar a buen puerto. El organismo público encargado de asegurar los depósitos de los bancos tiene sobre la mesa una oferta de BBVA y Banco Sabadell que resolvería todos los problemas, evitando un agujero inasumible al FGD y la posibilidad de que Estado asuma más déficit.
Tras meses de negociaciones estancadas, las dos entidades han ofrecido asumir algo más de la factura pendiente de los esquemas de protección de activos (EPAs) de CAM –que asumió Sabadell- y Unnim –comprada por BBVA-, según fuentes financieras consultadas por Vozpópuli. Un gesto que ha sido bien recibido por la Comisión Gestora del FGD, compuesta por el Banco de España, el Tesoro, Hacienda, Santander, BBVA, la Ceca y Caja Laboral. Ninguna de las entidades hizo comentarios.
La clave de la negociación es encontrar una solución para liquidar de forma acelerada los EPAs de CAM y Unnim sin generar un agujero inasumible al Fondo ni déficit al Estado. La liquidación se hará con una venta de activos a Cerberus, en el caso de BBVA; y a otros fondos, en varias subastas que tiene en marcha Sabadell.
Más del 20% de coste
Además, las negociaciones persiguen otros dos objetivos: que el FGD ponga ya un precio definitivo a estas ayudas concedidas al comienzo de la crisis, de cara a una liquidación de las mismas; y permitir a Banco Sabadell y BBVA vender aceleradamente sus carteras de activos problemáticos y sanearse como pide el Banco Central Europeo (BCE).
La oferta de BBVA y Sabadell todavía no se ha cerrado con números, aunque las fuentes consultadas descartan que se alejen en más de 10-15 puntos del 20% del coste del EPA que les corresponde.
El Presidente de Banco Sabadell, Josep Oliu. EFE
Cuando Sabadell compró CAM en 2011 y BBVA hizo lo propio con Unnim en 2012, el Estado les dio unas garantías públicas para cubrir parte de la cartera problemática de estas entidades. Como entonces el Frob no tenía las mismas competencias que ahora, se hizo a través del Fondo de Garantía.
En CAM, se acordó que el FGD asumiría el 80% de las pérdidas de una cartera de 24.644 millones, el resto Sabadell, durante un periodo de diez años hasta mediados de 2021. Pasado dos tercios de este periodo, el Fondo pública calculaba que esta cartera sufrirá pérdidas por 12.248 millones –la mitad de lo cubierto- de lo que el Fondo tendría que pagar casi 6.700 millones.
Lo que ahora quiere hacer Sabadell es traspasar gran parte de su exposición inmobiliaria –propia y de CAM- a fondos oportunistas. Estas operaciones son a un mayor descuento, lo que implicaría un agujero al FGD, de ahí que Sabadell ofrezca cubrir parte.
El caso de BBVA es parecido, sólo que la entidad presidida por Francisco González ya tiene un acuerdo de traspaso del ladrillo a Cerberus. Este pacto sólo está pendiente del Fondo de Garantía.
Francisco González, presidente de BBVA. Efe.
En el caso de Unnim, la cartera cubierta con el mismo esquema que la de CAM -80/20- es de 7.359 millones. A finales de 2017, el fondo calculaba pérdidas para la cartera de 3.633 millones, de los que al Fondo le corresponden 1.842 millones.
Este rompecabezas está cerca de solucionarse tras el gesto de las dos entidades. Las distintas partes involucradas temieron por las negociones con el cambio de Gobierno. Aunque, añaden las fuentes consultadas, las primeras señalas enviadas por la ministra Nadia Calviño han sido buenas. |