Las cuotas cerraron ayer en los 1,28 euros -mínimo histórico-, lo que supone una caída del 78% desde su debut, prácticamente la misma que ha cedido su gestora de fondos desde que arrancó la crisis
A medida que transcurren las semanas se constata el abandono que está sufriendo el pequeño inversor de Caja Mediterráneo (CAM). Y no sólo de los ´accionistas´, es decir, de los cuotapartícipes, sino también de los partícipes de fondos de inversión. Por no hablar de los que tienen preferentes y subordinadas.
Mientras tanto habrá que esperar a la celebración de las elecciones del próximo 20-N para conocer qué entidad se va a quedar con la caja alicantina en el proceso abierto que mantiene el Banco de España. Pero el tiempo va pasando y los minoristas asisten -no sin cierta desilusión- a cómo se reducen sus inversiones en los productos de la entidad intervenida por el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB).
Las cuotas participativas hicieron ayer historia al cerrar en el nivel más bajo desde los 5,84 euros que debutaron en bolsa en julio de 2008. Concretamente lo hicieron en los 1,28 euros después de dejarse un 3,76%, ´pecata minuta´ comparado con el 78% que se han dejado en el camino en su trayectoria bursátil. Sin embargo, todavía están algo lejos de los 0,91 euros que llegaron a marcar durante la sesión del pasado 26 de agosto.
"La situación es muy complicada y nos sentimos completamente abandonados", advierte Víctor Baeta, presidente de la Asociación de Impositores Valencianos de la CAM, que ha solicitado formalmente una entrevista con el conseller de Economía para que "haga de mediador entre los cuotapartícipes y los actuales administradores del Banco de España en la caja alicantina". Aunque algún analista consultado por este digital se sorprende que esta valor no valga cero, al ser la caja una entidad en quiebra técnica e intervenida.
"ASÍ NOS HAN PAGADO"
Baeta tiene claro que los ´accionistas´ de la CAM junto al Estado han "contribuido a capitalizar la caja para pagarnos así", mientras confía en que más pronto que tarde obtengan una respuesta y para ello no se va a cansar de reunirse con los responsables del Banco de España y el FROB "tantas veces como sea necesario por el bien de la entidad, sus trabajadores, depositantes e impositores".
Mientras tanto, Gestimed, la gestora de fondos de inversión de la CAM, cerró octubre con el patrimonio más bajo de los últimos años, según las cifras provisionales aportadas esta misma semana por la Asociación de Instituciones de Inversión Coletiva y Fondos de Pensiones (Inverco).
La estampida de los partícipes va a más hasta el punto que gestoras de tamaño bastante más reducido se sitúan ya por encima de Gestimed, que ocupa el puesto número 51 del ranking que elabora la patronal del sector.
NI SOLVENCIA, NI LIQUIDEZ
Una posición que dista mucho de las posiciones que históricamente ha ocupado -entre las veinte primeras- y que es síntoma evidente de la desconfianza que inspira la entidad entre sus pequeños inversores. Una circunstancia a tener muy en cuenta, dado que este patrimonio de fondos se dirigió en un primer momento a participaciones preferentes para ganar solvencia y más tarde a depósitos para liquidez.
Los 484,95 millones de euros que gestionaba Gestimed a 31 de octubre pasado, siempre según los datos provisionales de Inverco, representan una caída del 31% en lo que va de año y de un 55% tomando como referencia los 1.071,20 millones que tenía a buen recaudo el último día de 2009. Nada comparado con el 80% que se ha dejado atrás desde que arrancó la actual crisis, puesto que a 31 de diciembre de 2007 el patrimonio de la gestora de la CAM era de 2.305,32 millones de euros. |