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DAVID NAVARRO ALICANTE

 El Sabadell resolvió ayer otra de las "herencias envenedadas" que recibió de la CAM al llegar a un acuerdo con la aseguradora Aegon para comprarle el 50% de la filial que compartía con la antigua caja de ahorros alicantina -Mediterráneo Vida S.A.- por un importe de 449 millones de euros. De esta forma la entidad catalana se ahorra casi 150 millones de euros y un largo proceso judicial ya que la compañía holandesa había presentado una reclamación ante la Corte Internacional de Arbitraje exigiendo una indemnización de 600 millones de euros por incumplimiento de contrato. 
En concreto, la aseguradora señalaba que el acuerdo firmado con la CAM obligaba a la entidad a comprarle su parte de la citada filial sin mediar más negociación si se producía un cambio en la propiedad de la caja. En realidad, los responsables de Aegon ni siquiera esperaron a que este cambio de propiedad se produjera y desde el mismo momento en que la CAM empezó a negociar una posible fusión con otras cajas de ahorros amenazó con ejecutar el contrato. 
Tanto es así que la posibilidad de tener que desembolsar estos 600 millones de euros fue uno de los motivos que acabaron frustrando la integración con Cajastur, Caja Cantabria y Caja Extremadura en la primavera de 2011. Al frustrarse aquella operación se quedó sin argumentos pero cuando el Banco de España intervino la caja alicantina en el mes de julio volvió a la carga. Ni siquiera esperó a que se resolviera la subasta y en noviembre de ese mismo año presentó su demanda ante el tribunal de París.
Para entender tanta prisa hay que tener en cuenta que la propia Aegon tuvo que ser rescatada por el Gobierno holandés al principio de la crisis, que le obligó a reducir su exposición a aquellos mercados, como el español, que consideraba con mayor riesgo. 
La suerte para el Sabadell es que la legislación obliga a provisionar los posibles efectos de estas demandas desde el mismo momento en que se presentan, por lo que ya recibió el negocio de la CAM con las posibles pérdidas cubiertas. De hecho, desde el banco catalán insistieron ayer en que el desembolso de 449 millones pactado no tendrá repercusión sobre sus resultados.Tras el acuerdo, además, el Sabadell se queda con el 100% de la propiedad de la filial, especializada en seguros de vida y pensiones.

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