«La clave está en el mostrador»; Lo dijo alto y claro hace unos días el director general del Banco Sabadell, Miquel Montes, ante una representación de lo más florido del empresariado alicantino; Aunque se refería, como es lógico, a los mostradores de las 600 sucursales que le quedarán a la nueva CAM en sus territorios históricos de Alicante, Murcia, Valencia y Baleares, el mensaje también tenía una clave secreta: los de la nueva y monumental terminal aeroportuaria de El Altet.

El propio Miquel Montes deslizó algún detalle en su exposición sobre la nueva CAM, a la espera de que Bruselas dé el visto bueno final de la subasta por parte del Banco de España. Pero, por motivos obvios, el Sabadell no quiere ahondar en más datos. La campaña publicitaria y de márketing para recuperar la dañada imagen de la Caja alicantina tendrá como protagonista principal la terminal del aeropuerto internacional, centro estratégico del negocio que llega a la provincia en forma de divisas por el turismo o de ejecutivos de empresa y, por otro lado, símbolo del desembarco que quiere realizar el Banco de Sabadell para reflotar la entidad en el más breve espacio de tiempo.

Aunque esa campaña se divulgará también por medios de comunicación escritos y audiovisuales, la terminal de El Altet, como icono de prosperidad y modernidad, será el enclave elegido para amplificar sus efectos a la hora de recuperar clientes y negocio en la CAM.

Fuentes del banco que preside Josep Oliu llevan muchos días trabajando sobre la estrategia de márketing y comunicación. En realidad, está ya ultimada, a la espera de que la dirección general de la Competencia de la UE apruebe en los próximos días la operación de adjudicación. De hecho, incluso se habría aprovechado, en caso de estar ya resuelto el trámite, la mayor llegada de turistas a lo largo de la Semana Santa y la semana semifestiva de la Santa Faz, en la que precisamente podría dictaminar Bruselas, según las previsiones del Banco Sabadell.

En su conferencia en Fundesem, Miquel Montes incluso deslizó que le «daba miedo» esta campaña para recuperar la dañada imagen de CAM, lastrada tras las intervención en julio a raíz de conocerse los escándalos sobre pensiones vitalicias e indemnizaciones de su anterior equipo directivo. Este diario ha sabido que dicha campaña de imagen será de un perfil «agresivo» para llamar la atención del cliente antiguo y nuevo de la neonata CAM.

Los equipos directivos llegados desde Barcelona en las últimas semanas también ultiman una gran convención para unos 3.000 empleados de la CAM a los que se les ofrecerá un plan de formación integral con el fin de convertir a los empleados CAM en «buenos especialistas en vender».

El Banco Sabadell quiere especializar a todos sus empleados, incluso los que siempre han estado encerrados en despachos, en la venta de productos a particulares, pero sobre todo a las empresas y pymes y la banca personal (rentas altas que necesitan asesoramiento para la gestión de su patrimonio). Quiere recuperar pronto parte de 100.000 clientes huidos.